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Brasil: Isadora Garcia, una de las tres autoras junto con Marianna Olinger y Simona Gomes del estudio de Promundo “Consulta con niños sobre castigo físico y humillante: relato de una experiencia”, explica que: “A través de las declaraciones de los niños, pudimos ver que ellos se ofenden con los castigos físicos y humillantes. El niño se siente impotente para revirar, queda desmoralizado en relación al adulto y se resiente. Pero una cosa sorprende: el niño acepta el castigo y se ve a sí mismo aplicando la violencia a otros niños, a los hermanos y en el futuro hasta a los hijos imaginarios”, explica. El estudio resalta que esas prácticas se transmiten entre generaciones y que, muchas veces, la idea del uso de la violencia para disciplinar al hijo o la hija también son una herencia de los padres. De acuerdo con el estudio, en la mayoría de los casos, quien usa el castigo físico o humillante es la madre del niño, por estar más presente en la vida de los pequeños.
El 25% de los niños de Brasil solo ha sido reconocido por su madre en el registro civil, informó el diario O Globo. La cifra fue calculada a partir de inspecciones del Consejo Nacional de Seguridad. “Entre 2000 y 2008 fueron emitidos en el país 31,2 millones de registros de nacimiento. Si admitimos que tres de cada cuatro niños no tienen reconocimiento paterno, estamos hablando de cerca de 7,8 millones de niños en esa situación”, asegura la socióloga Ana Liesi Thurler, autora del libro “En nombre de la madre: el no reconocimiento paterno en Brasil”.
De acuerdo con O Globo, el Consejo Nacional de Justicia se prepara para lanzar este año una campaña paraobligar a las oficinas de registro y a los juzgados a buscar a los padres que no registran a sus hijos en los certificados de nacimiento.
“Los padres no reconocen a sus hijos porque no quieren pagar pensión alimenticia. Generalmente no viven más con la madre del niño y no tienen lazos afectivos con el menor. Entonces no quieren pagar dinero”, asegura Marli Marcia da Silva, presidente de la Asociación de Madres Solteras del estado de Pernambuco.